Países donde las personas viven más de 100 años
Investigadores han identificado y analizado hábitos y estilo de vida en cinco regiones del mundo donde hay población centenaria
Hace unos años, investigadores científicos descubrieron que en cinco lugares del planeta había un sorprendente número de personas que superaban en décadas la expectativa de vida del resto del mundo. Estos lugares han sido denominados Zonas Azules.
Los habitantes de estas regiones han sido objeto de numerosos estudios debido a su longevidad y salud excepcional, estas personas comparten varios hábitos que parecen contribuir a su larga vida.
Si bien estas prácticas no garantizan una vida extremadamente longeva, las observaciones y estudios de las Zonas Azules sugieren que pueden aumentar significativamente la probabilidad de vivir más tiempo y con mejor salud.
La isla de Okinawa en Japón, la región montañosa de Cerdeña en Italia, la Península de Nicoya en Costa Rica, la Isla de Icaria en Grecia y Loma Linda en California, son los 5 lugares del mundo que fueron definidos cómo Zonas Azules hasta el momento.
Actividades físicas moderadas y constantes son típicas en las zonas azules – (Imagen Ilustrativa Infobae)
Qué son las “zonas azules”
Una “zona azul” es un área geográfica específica donde se observa una longevidad excepcionalmente alta entre sus habitantes. Estas regiones han sido identificadas y estudiadas por su alto porcentaje de personas que superan los 90 y 100 años de edad.
Las investigaciones sobre estas zonas azules se centran en comprender los factores biológicos, ambientales, dietéticos y socioculturales que contribuyen a la longevidad y a la reducción de enfermedades crónicas.
Dónde están ubicadas las Zonas Azules
BARBAGIA, CERDEÑA (Italia)
La región montañosa de Cerdeña, Italia, destaca por la alta longevidad de sus habitantes (Shutterstock)
Al pensar en Cerdeña, lo primero que surge son el mar azul y las casas sobre las laderas cayendo en la costa. A pesar de eso, los pueblitos del interior de la isla, los que están en el centro, en la zona montañosa, en especial, Seulo y Esterzili fueron los que llamaron la atención de los especialistas.
En Seulo, en las últimas dos décadas, más de veinte personas sobrepasaron los cien años de vida. El número impacta por sí solo. Sin embargo adquiere más relevancia si se tiene en cuenta que la población total apenas excede el millar de personas: 1063 habitantes según el último censo.
LOMA LINDA (Estados Unidos)
La comunidad adventista de Loma Linda en California promueve una vida sana y religiosa (Shutterstock)
Loma Linda es una comunidad adventista de la Iglesia del Séptimo Día. Por las calles prolijas del pueblo se ven muchos ancianos. Más que en el resto de las ciudades del país. No es un lugar de retiro ni uno en el que exista un conglomerado de geriátricos.
Al ser una comunidad adventista, la religión tiene una gran influencia. Los científicos que estudiaron los frecuentes casos de extrema longevidad en la comunidad, le atribuyen una importancia vital a la fe y a lo que sus miembros depositan en las creencias religiosas. Además los adventistas, desde el Siglo XIX hacen hincapié en la vida sana y en la alimentación equilibrada (lo hacían aún sin evidencias científicas, guiados por el instinto y hasta por la ignorancia: el Dr. Kellogg inventó sus cereales, los cornflakes, en virtud de ese método).
Esa vida recoleta está repleta de prohibiciones que derivan de preceptos religiosos. No se puede fumar, el alcohol está prohibido, todo lo que se pueda llegar a considerar una actividad que propenda a la “vida disipada” está proscripta. Los sábados se dedican por completo a la iglesia y a actividades comunales. Más allá de las consideraciones religiosas y del clima opresivo, la vida saludable rinde sus frutos.
OKINAWA (Japón)
En Okinawa, Japón, los residentes tienen un tercio más de posibilidades de alcanzar los 100 años (Shutterstock)
Okinawa representaba un desafío para los investigadores. El mundo oriental tiene otros códigos y otras costumbres. Esta isla posee un elemento novedoso como el Ikigai, que se puede traducir como propósitos de vida. El Ikigai es el motivo, la razón que los hace levantar cada mañana de su cama.
Los números de Okinawa sorprenden. La comparación de los promedios con los de Estados Unidos en cuestiones de salud y calidad de vida son contundentes. Un residente de la isla japonesa tiene un tercio más de posibilidades de alcanzar los cien años que uno norteamericano.
El porcentaje de mujeres afectadas por cáncer de mama es un cincuenta por ciento inferior. Y mejora alrededor de un tercio respecto a las enfermedades cardiovasculares. La incidencia de las demencias seniles y del Alzheimer es diez veces menor.
PENÍNSULA DE NICOYA (Costa Rica)
En Nicoya, Costa Rica, los ancianos disfrutan de clima agradable y frutas tropicales (Shutterstock)
Esta zona de Costa Rica es un pequeño apéndice que sobresale y se interna en el Pacífico. En los mapas aparenta ser una desviación del país centroamericano, como un agregado hecho con desprolijidad. Es una zona pobre que hace poco tiempo estuvo aislada del resto de su país. No había grandes rutas ni autopistas que las comunicaran.
Los ancianos se benefician de la presencia del mar, del clima agradable, de las frutas tropicales que comen con fruición. Pero la vida cotidiana es dura. Sin grandes lujos, obliga a trabajar muy duro para poder comer.
ISLA DE ICARIA (Grecia)
La aislada isla de Icaria en Grecia fortalece los lazos sociales y familia (Shutterstock)
Al ser una isla mediterránea, Icaria comparte muchas de las características con Barbagia y los poblados de Cerdeña. Islas montañosas, clima agradable, el agua como límite, alimentos naturales. La geografía de la isla hace que los desplazamientos exijan mantener un estado físico acorde, cada traslado requiere esfuerzo.
Icaria está aislada del resto de Grecia, no tiene puertos naturales. Esa limitación produjo, como contracara, que se fortalecieran los lazos internos, tanto los sociales como los familiares. Y que surgiera una cultura propia, con escasa “contaminación” exterior, que solidifica lo que surge entre ellos.
Los 9 hábitos de las personas en las Zonas Azules para vivir 100 años
- Actividad física moderada, constante y persistente: estos longevos no son ultramaratonistas (aunque sí en la carrera de la vida, parece) pero siempre han trabajado y han necesitado de esfuerzo para trasladarse de un lado a otro en sus hábitats.
- Tener un propósito de vida: su propio Ikagai que los motive a levantarse cada mañana.
- Niveles bajos de estrés: evitar las preocupaciones laborales, persistentes, que suman presión a la vida diaria.
- Dietas moderadas en calorías. Los habitantes de Okinawa mantienen un hábito: comen hasta estar cerca del saciamiento. Pero nunca se exceden. Aplican un principio de Confucio: Come hasta que estos lleno en 8 partes de diez.
- Alimentación centrada en frutas y verduras. Las comidas basadas en lo que la naturaleza proporciona rige las dietas de estos lugares.
- Uso moderado del alcohol: el alcohol permitido en pequeñas dosis. Todos los demás excesos, adicciones o consumos que alteren el cuerpo y la conciencia están proscriptos. Las drogas y el cigarrillo están desterrados de las Zonas Azules.
- Tener fe: compartir creencias, esperanza en el futuro y hasta la actividad religiosa son factores que se repiten en estas comunidades.
- Vida familiar: la red de contención familiar, vivir con alguien, cuidar y ser cuidado. En estas Zonas Azules se ha comprobado que quienes son pareja viven que más que sus hermanos. Es decir, una esposa tiene mayor esperanza de vida si su esposo es longevo que si el que lo es su propio hermano. Otro aspecto que indica que los genes no son los que determinan todo.
- Vida social: un involucramiento en la vida de la comunidad. El corolario de este punto es que la sociedad los admita, tenga reservado un lugar para sus ancianos.
Fuente: https://www.infobae.com/tendencias/2024/06/03/que-paises-tienen-zonas-azules-lugares-donde-las-personas-viven-mas-de-100-anos-y-en-que-regiones-quedan/