¿Cómo evitar el aburrimiento en las dietas?
Cuando se piensa en un plan de alimentación para bajar de peso, algo que frecuentemente se llama «dieta», lo primero que nos viene a la mente es una porción de carne con ensalada o una pechuga de pollo a la plancha con puré de calabaza. Si bien este tipo de platos pueden, en principio, ayudar a «perder» algunos kilos, con el correr del tiempo resultan difíciles de sostener. ¡Llega el aburrimiento de comer siempre lo mismo!
Es en ese momento cuando comienza la búsqueda de otras alternativas, aquellas que dejamos completamente de lado por creer que engordan, en lugar de buscar adaptarlas a comidas más saludables. La falta de variedad y de gustos, cuando se prolonga en el tiempo, acaba por ocasionar el abandono del plan de alimentación y del cuidado de la dieta. Y es aquí donde aparece el famoso efecto rebote, que desencadena un incremento de peso y en algunos casos puede llevar a volver al punto de origen.
Si bien a muchas personas les sirve tener un menú más monótono en un principio, cuando se trata de dar continuidad en el tiempo necesitamos más variantes en las comidas, más sabor y que además sean bajas en grasas, en azúcares y calorías para que nos ayuden a seguir bajando de peso.
Es totalmente posible bajar de peso y comer de manera saludable sin aburrirse. ¿La clave? Animarse a experimentar más en la cocina dedicando un poco más de tiempo a la elaboración de las comidas, consiguiendo recetas, diferenciando qué sabores más agradables, probando alimentos y poder probar preparaciones que no comemos solo porque no tenemos el hábito o nos quedamos con la idea de que «no nos gustan» porque en algún momento las probamos.
Sin embargo, no todos tenemos el tiempo necesario para hacer esta búsqueda. Además, hacerlo sin ayuda alguna puede resultar muy dificultoso. Frente a este escenario, las respuestas comunes suelen ser: «No tengo tiempo: ni de ir a hacer las compras, ni de cocinar», «No me voy a poner a cocinar para mí solo», «No me gusta cocinar».
¿Qué alternativas existen para ahorrar tiempo y comer saludable?
Una de las alternativas es buscar algún profesional especialista en nutrición que nos ayude y nos guíe.
Otra opción muy confiable y con buenos resultados es consumir viandas light que nos muestren que comer rico, sano y bajar de peso es posible.
Muchas viandas frecen ambos servicios, ya que son preparaciones gourmet que cumplen con todo lo que anteriormente se ha mencionado. Además, el servicio da la posibilidad del acompañamiento con profesionales de nutrición, actividad física y motivación para que el proceso sea más fácil y agradable en el presente, completo y nos ayude a sentar las bases para luego mantener los resultados conseguidos a través de poder sostener estos nuevos hábitos saludables.
A su vez, tienen muy presente la necesidad de mantener los gustos y no prohibir ninguna comida. Por eso, han desarrollado una línea de postres, que sacían, con las cantidades, ingredientes y preparaciones indicadas. El objetivo es cubrir la necesidad del dulce que muchos tenemos y, con la idea que engordan, procedemos a eliminarlos completamente en un plan de descenso de peso, lo cual ocasiona angustia y ansiedad, que hacen que no podamos incorporar hábitos perdurables en el tiempo, ya que no nos sentimos a gusto con ello.
La clave no es eliminar variedad, sino aumentarla incorporando nuevos sabores, cocciones y recetas. Solo o con ayuda, pero no dejes de probar el único camino que te llevará a un plan exitoso.
Bajar de peso, estar sano y comer rico es posible.
l contenido de la dieta es muy importante. Elegir bien los alimentos que se ingieren es esencial para encarar una dieta, ya sea para comer más sano o para perder peso. Sin embargo, el concepto de comer saludablemente va más allá de los productos únicamente, que se configuran como una parte de esa idea. Alimentarse de manera saludable también es comer de la forma adecuada, no sólo elegir los productos correctos.
Entonces, la forma es tan importante como el contenido de la dieta.
Analicemos una situación muy común, que nos sirve de ejemplo:
Al levantarme tomo un café o unos mates de desayuno y salgo a enfrentar el día. Si no siento hambre, mejor: ¡aprovecho para no comer así bajo más! El día sigue transcurriendo y quizás pico algo de almuerzo, a la tarde otro café o mates. Llego a la tardecita sin haber ingerido demasiado, como algo y, casi sin darme cuenta, como otra cosa y otra y luego la cena y después de la cena algo dulce, total vengo bien, no comí nada en todo el día…Las porciones y la forma de comer son tan importantes como los productos que se ingieren
Y la realidad es que esa cena es como «la última cena» y acabo por incorporar las calorías que necesité durante todo el día y más también, dándoselas al cuerpo en un momento en el cual baja la actividad y el gasto calórico, disponiéndose para el final del día y el descanso. Entonces, toda esa energía, todas esas calorías, terminan convirtiéndose en grasas y acumulándose en distintas zonas del cuerpo.
De esta manera, en lugar de bajar, aumento de peso y me pasé todo el día con menos cantidad de energía de la que puedo tener si le voy dando a mi cuerpo de a poco para que la pueda ir utilizando. Y si esa energía se la doy con alimentos saludables, no sólo registra el ingreso de calorías que hace que funcione mejor el metabolismo sino que si le resultan pocas y gasta de lo que tiene reservado como grasa.La alimentación es clave para llevar una vida saludable
Podemos notar entonces que es tan importante qué elijo para comer, así como el modo en que lo distribuyo en el día. Ahora bien, entre todas las actividades que realizamos durante el día, muchas veces «se nos pasa u olvida» comer y si nos acordamos no tenemos «a mano» algo sano por eso un buen recurso es prepararse la ingestas para el día y llevarlas en el auto o bolso para consumirlas cuando sea el horario.
Si esto se te complica una buena alternativa es probar con el servicio de viandas completas, es decir, en el cual llegan las 6 comidas diarias y rotuladas para que ingesta corresponden de manera que lo único que tenes que hacer es trasladarlas y acordarte de comerlas en tiempo. Si se te olvida o se te pasa el tiempo suele dar buen resultado colocar una alarma en el celular para que te avise que tenes que realizar una ingesta, hasta que tu cuerpo se acostumbre y te lo empiece a pedir solo. Porque éstos nuevos hábitos van quedando establecidos y luego es más fácil sostenerlos.
Fuente: https://www.iprofesional.com/health-tech/344247-como-evitar-el-aburrimiento-en-los-planes-de-alimentacion