Mitos sobre la caída del pelo
Salud capilar: Algunas de las falsas creencias vinculadas al cuidado del cabello se remontan hasta la Antigüedad. Aquí, 7 de las más populares.
Si se arranca una cana salen 7, cortar el pelo hace que crezca con más fuerza y varias ideas más sobre la caída del cabello y la salud capilar en general se reproducen de generación en generación. Pero ¿qué hay de cierto en ellas?
Es que para hablar del origen de las falsas creencias que rodean al pelo y a la salud capilar habría que remontarse a miles de años atrás. De hecho, aparecen en la mitología griega, en el antiguo Egipto y en la historia hebrea con Sansón, entre otros.
La médica dermatóloga Vanina Gegdyszman contribuye a despejar siete falsas creencias que se reproducen con frecuencia.
El lavado de cabeza promueve la caída del pelo: falso
¿No lavarlo porque se va a caer en mayor cantidad? Hay que comprender que el lavado es necesario porque la higiene garantiza salud, afirma la médica del Sanatorio Caseros. La clave está en con qué se realiza. Existe una caída normal diaria, que forma parte del recambio natural del cabello, pero si no se lava la cabeza un día, los pelos en fase de caída se irán durante el próximo lavado, advierte.
Si se arranca una cana, saldrán 7 más: falso
Una cana es un pelo que crece de un folículo piloso sin melanina. Si se arranca una, solamente afecta a ese folículo en particular. No existe evidencia científica acerca de que esto modifique a los vecinos.
Pócimas en el champú para evitar la caída del pelo: falso
Cebolla, anticonceptivos, preparados caseros y, seguramente, cientos más. Ante todo, para tratar una caída de pelo anormal es necesario tener un diagnóstico de la situación. Buscar la causa, descartar otras y, en base a eso, plantear un tratamiento.
«Si una caída aumentada de pelo es frenada por un champú con cebolla, esa pérdida se detendría, de todas maneras, con o sin cebolla, con o sin anticonceptivos, o con o sin pócimas mágicas. Al momento de preocuparse por una caída excesiva, nada mejor que descartar una eventual patología«, afirma Gegdyszman.
Toda caída de pelo es estrés o hipotiroidismo: falso
«En este punto, hay que aclarar que el estrés puede llegar a desencadenar un aumento de caída de pelo, un efluvio telógeno. Situaciones con un aumento de liberación de cortisol conducen a una defensa del folículo, una protección, con una caída aumentada reactiva durante los dos a tres meses posteriores. Pero no toda caída es secundaria a una situación de estrés, sino que es necesario descartar otros factores», precisa la especialista. Anemia, cambios de peso abruptos, fármacos o hipotiroidismo pueden estar entre múltiples causas.
Cortar el pelo para que crezca más y mejor: falso
«La fibra capilar es una fibra muerta, la vida se encuentra en el folículo piloso, dentro de la piel. Si se corta la punta de una fibra de lana, ¿cómo afectaría al ovillo?», ejemplifica la médica. Y continúa: «Solamente, le daría una imagen de prolijidad, pero no estimularía el crecimiento en su origen«. Con los cortes, se eliminan las puntas abiertas, el pelo dañado y los restos de tratamientos antiguos.
Toda descamación del cuero cabelludo es caspa: falso
Al presentar descamación en el cuero cabelludo, los autodiagnósticos conducen, de manera unánime, a determinar que es caspa, aunque no es así. «Por ejemplo, la acumulación de productos por un incorrecto lavado de cabeza o de aquellos inadecuados podrían ser la causa de una descamación. También sobresalen la caspa en sus diversas variantes (seca, grasa, adherida), la dermatitis seborreica y la psoriasis, entre otros», precisa Gegdyszman.
Cepillar el cabello 100 veces es beneficioso: falso
El pelo es frágil, sobre todo, con el paso del tiempo, los tratamientos químicos, las canas, el clima y frente a todo lo que se encuentra expuesto. Cepillarlo continuamente lo único que genera es mayor quiebre y fricción. Se debe desenredar lo necesario, pero sin abusar, aconseja la dermatóloga.
«El amor por uno mismo, por aceptar el propio pelo, cuidarlo y verse bien es salud. El pelo está totalmente involucrado en todo esto y la ciencia seguirá acompañando este proceso, encontrando aquello que es mejor para cada tipo de pelo y cuero cabelludo», concluye.
Fuente: Clarín