Creció la cantidad de gente que vive en las calles de la Ciudad

El Gobierno porteño dio a conocer el último censo y anunció un nuevo modo de abordar la problemática.Los datos revelan que con respecto al año pasado se registró un 21% más de gente viviendo en esas condiciones.Según la Ciudad, el 60% tiene problemas de consumo o psiquiátricos y desde una organización dicen que se los criminaliza.

Gente que vive en la c

Entre las 20 y las 5 de la madrugada del 17 al 18 de abril el gobierno porteño llevó a cabo el censo de gente en situación de calle. Este año el trabajo de los equipos interdisciplinarios que participaron del relevamiento identificaron a 4.009 personas. De ellas 2.684 se encontraban en los paradores.

Estos números indican que, en comparación con el último relevamiento de noviembre de 2023, la población total creció el 14% en un año.

Según los datos compartidos por la Ciudad, el 60% tiene problemas de consumos o algún tipo de «trastorno mental severo, lo que desata niveles de violencia». Y agregaron que, en consonancia con otras ciudades del mundo, «hay más violencia en las calles».

Indicaron que el 63% de las personas tenían alguna vinculación con los paradores (el nombre oficial es CIS, Centros de Inclusión Social); es decir, pasaron alguna vez a dormir, o a comer, a bañarse o a realizar talleres. Y según el relevamiento, más del 50% no tiene domicilio en territorio porteño.

Por otra parte, el censo permitió identificar las comunas en donde hay más gente en situación de calle: la 1, 2, 3, 4, 6, 7, 13, 14 y 15.Personas en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires. Foto: Martín Bonetto

El trabajo fue realizado por el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat y la Dirección General de Estadísticas y Censos. Participó además la Defensoría del Pueblo porteño, como veedora. En total se movilizaron 75 equipos, de 4 personas cada uno, que recorrieron las 15 comunas porteñas.

Es el primer censo en la gestión de Jorge Macri y los cambios que se buscan implementar en la política vinculada a la gente en situación de calle arrancaron con el pie izquierdo. Una semana después de realizar el relevamiento, se vinculó a esta población con el «Operativo Especial Orden y Limpieza». En su cuenta de Instagram, el jefe comunal mostró, con una foto de un «antes y ahora», el desalojo de personas que ocupaban el espacio público. Luego la borró.

«Que una mala comunicación no opaque una buena política pública», dicen en el entorno de Macri.

Ocurre que en estas semanas se implementaron una serie de cambios vinculados a la gente que duerme en la calle; por un lado un cambio de nombre en el programa, que dejará de llamarse Buenos Aires Presente (BAP) para ser rebautizado como Red de Atención.

Y por el otro, distinguirlos en tres grandes grupos, aquellos que son emergentes, posiblemente afectados por la situación económica actual; crónicos, quienes llevan años viviendo en las calles; y peligrosos. Son el grupo que la Ciudad considera que crece no sólo en Buenos Aires, sino también en todas las grandes urbes del mundo.La Ciudad recurrió a tres categorías para diferenciar a la gente que vive en situación de calle. Foto: Martín Bonetto

«Primer dato relevante, a las ONG les cuesta conseguir voluntarios porque cada vez tienen más miedo de participar en las acciones solidarias. Incluso sabemos que hay iglesias en donde ya no les dan de comer en el interior de los recintos porque la violencia creció y tienen miedo. Se puso difícil, picante», concluyeron fuentes del ejecutivo porteño.

Esto explica que se haya tomado la decisión de incorporar un parador específico para tratar temas de salud mental. Incluso utilizando un vehículo del SAME adaptado para situaciones de brotes psiquiátricos que puedan ocurrir en la vía pública. «La realidad de la calle es muy compleja, no es la misma que hace diez años. Las políticas actuales no alcanzan porque no siempre la crisis económica explica que alguien esté en la calle. Por eso también buscamos segmentar las respuestas«, indicaron.

El 74% de las personas que se encuentran en la calle son hombres, por eso la mayor cantidad de paradores están destinados a ellos. Hay 3.300 plazas disponibles en 47 paradores; en unas semanas se inauguraría uno nuevo, destinado a familias.

Según el ejecutivo porteño en este momento sólo hay 3 menores de edad viviendo en la calle, «cronificados»: «Eran alrededor de 40, pero logramos bajar esa población. Con el nuevo parador de familias se suman 180 plazas», informaron.

En esta edición del censo, el ejecutivo porteño hizo foco en la demanda vecinal: «Impulsamos un cambio profundo en la manera de abordar la problemática. Es una política para los 3 millones de porteños, para los que están en las calles y para los vecinos que quieren una buena convivencia«, expresaron.

«No generalizar pero tampoco ignorar lo que pasa», dicen desde el Ejecutivo. Entienden que por ejemplo desde las ranchadas surgen problemas de inseguridad, desde el robo de cables o de bronce, hasta situaciones de violencia extrema, como la muerte del ingeniero Mariano Barbieri en los Bosques de Palermo o la reciente violación de una mujer en el Hospital Fernández.

«El límite es la violencia contra el otro», justificaron así el cambio en la política de abordaje. También habrá bases operativas con recorridas permanentes por puntos estratégicos, y la apertura de nuevos Dispositivos de Primer Acercamiento (DIPA); en estos lugares de día las personas podrán ir a comer, bañarse y tener una entrevista con un trabajador social o un psicólogo.

Reclamo de las organizaciones sociales

De todas formas, las organizaciones sociales continúan pidiendo un censo más abarcativo. Entienden que se trata de un conteo, de una foto. Horacio Avila es referente de Proyecto 7, una organización integrada y coordinada por gente en situación de calle. Gestionan cuatro Centros de Integración; uno de ellos destinado a talleres y capacitación, el resto a dar techo, comidas y contención. «Estos cuatro meses han sido terribles, pero esta situación viene de arrastre. Para las personas de bajos recursos son momentos dolorosos, en que se destrozan todas las redes. La crisis de la vivienda y los alquileres impacta de una manera brutal», le dijo a Clarín.

Actualmente le dan asistencia a unas 400 personas; mujeres, hombres, mamás con hijas e hijos y personas del colectivo LGBT+. Mayormente es una población estable.

El martes convocaron a una jornada de visibilización en el Obelisco y ofrecieron desayunos a 300 personas. «Nosotros vemos mucha gente en situación de calle. Estimamos que puede haber hasta 10.000 personas», calculó Avila. ¿En que se basa? Por un lado, en las 7.251 personas que contabilizaron en 2019, cuando las organizaciones sociales realizaron su propio censo. Desde ese momento en adelante se sucedieron la pandemia y una crisis económica detrás de otra; además de una inflación interanual que trepó al 289% (en base a datos oficiales del Indec, abril de 2023 – abril 2024).

Y además de todo esto, una crisis muchas veces invisibilizada, la de los hoteles y pensiones. Cada vez hay menos, lo que implica un impacto directo en esta población. En diez años la cantidad de establecimientos se redujo a la mitad, según un relevamiento de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad; y para empeorar la situación, el 45% de los existentes tiene condiciones de hacinamiento.

Proyecto 7 impulsa la realización de un nuevo censo, el tercero. Se llevaría a cabo como los anteriores, con 1.000 voluntarios, durante cuatro días (tres días de semana y uno del fin de semana), y diferentes franjas horarias. La Ciudad critica esta metodología porque entiende que podría duplicar la cantidad de gente.

Avila se mostró preocupado por las políticas implementadas por el gobierno de Jorge Macri; entiende que «criminaliza y revictimiza a las personas en situación de calle. Duermen a la intemperie, no son delincuentes», argumentó.

Fuente: https://www.clarin.com/ciudades/crecio-cantidad-gente-vive-calles-ciudad-dicen-suben-niveles-violencia_0_FBVv1swzuz.html