El Día de la Prueba del VIH
VIH: algo tan pequeño como una gota de sangre nos permitiría controlar una pandemia. En el Día de la Prueba de VIH es fundamental concientizar acerca de la importancia de realizarse testeos voluntarios y mejorar el acceso a la información sobre el VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual. En el caso del VIH, el diagnóstico tardío continúa siendo del 35%, lo que resta oportunidades de acceder a un tratamiento médico adecuado y a tiempo. Sobre la importancia de la realización del test opinó para Télam Leandro Cahn, director general de la Fundación Huésped.
Por Leandro Cahn
Dicen que el aleteo de una mariposa puede desatar un tornado. ¿Alguna vez imaginaste cómo una simple decisión puede cambiar el curso de la historia? El 27 de junio es el Día Internacional de la Prueba de VIH. Algo tan pequeño como una gota de sangre, pero tan grande que nos permitiría controlar una pandemia. En nuestro país el test de VIH es voluntario, confidencial y no requiere orden médica. En todos los hospitales públicos y centros de salud y en muchas organizaciones de la sociedad civil es gratuito. Y, en muchos de ellos, te brindan los resultados en menos de 20 minutos con solo un pinchacito en el dedo.
Entonces, ¿por qué casi 2 de cada 10 personas que viven con VIH en Argentina no conocen su diagnóstico? ¿Por qué el 30 por ciento de los diagnósticos de VIH se realizan de manera tardía? ¿Por qué todavía no se ofrece dentro del chequeo general? ¿Por qué no lo pedimos en nuestra rutina? El VIH no produce síntomas, solo podemos saber si está en nuestro cuerpo haciéndonos un test. Tomar la decisión de hacerse la prueba de VIH implica enfrentarse a miedos y desarmar estigmas. Pero, cuando lo hacemos, esa primera ficha que cae empuja a otras.
Cuando una persona se hace un test de VIH puede dar negativo o positivo. Si es negativo, se seguirá cuidando junto a sus parejas sexuales para mantener ese diagnóstico. Si resulta positivo, podrá acceder a excelentes tratamientos que son gratuitos en nuestro país y controlará el virus de manera tal que se convierta en una enfermedad crónica. Hoy sabemos que si una persona sostiene su tratamiento y mantiene su carga viral indetectable por al menos seis meses, no transmite el virus por vía sexual.
Testearse, cuidarse, tratarse, evitar la transmisión. Es un efecto dominó que nos puede llevar a cambiar el rumbo del VIH. La estrategia «90-90-90» nos indica que si el 90% de las personas con VIH conoce su diagnóstico, el 90% de ellas accede a un tratamiento antirretroviral y, a su vez, el 90% de ellas mantiene su carga viral indetectable, es posible controlar la pandemia en el mundo.
Sabemos que testearse es un acto individual, pero no se hace en solitario, existen redes de apoyo para acompañar a las personas que viven con VIH. ¿Y si invitás a un amigo o amiga? ¿Y si ese amigo invita a otro? Encontrá en donde huesped.org.ar dónde hacerte el test de manera gratuita.
Fuente: Télam