Etiquetado frontal también previene la obesidad infantil
La Coalición Nacional para Prevenir la Obesidad en Niños, Niñas y Adolescentes presentó el documento “Mitos y realidades del etiquetado frontal de advertencias en alimentos y bebidas”, con el objetivo de generar conciencia sobre la importancia de contar con un etiquetado frontal que informe a los consumidores, de forma clara y sencilla, sobre el contenido real de los alimentos y bebidas.
Y tras considerar que la herramienta es “una deuda pendiente en la Argentina”, consideraron que “el etiquetado frontal de advertencia es una medida fundamental que sirve de puerta de entrada para promover un conjunto de políticas integrales, como los entornos escolares saludables, la restricción del marketing de alimentos de baja calidad nutricional y políticas fiscales, todas ellas, medidas tendientes a mejorar los entornos alimentarios y prevenir el sobrepeso y la obesidad”.
En el documento, que cuenta con el apoyo de la Fundación Interamericana del Corazón (FIC) y Unicef resaltaron la importancia de “promover una política basada en los mejores estándares nacionales, regionales e internacionales de salud, que sostienen la promoción de un sistema de advertencias de octógonos basado en el sistema de perfil de nutrientes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS)”.
La publicación enumera “diez razones, respaldadas en evidencia científica, por las que la Argentina debe implementar el etiquetado de octógonos negros basado en el sistema de perfil de nutrientes de la OPS”.«El etiquetado con octógonos negros es el más efectivo ya que garantiza el derecho del consumidor a la información», aseguran desde la Coalición Nacional para Prevenir la Obesidad en Niños, Niñas y Adolescentes
1- El etiquetado con octógonos negros es el más efectivo ya que garantiza el derecho del consumidor a la información.
2- Es una herramienta útil para orientar a los consumidores en la compra de opciones de alimentos más saludables y para desmotivar el consumo de productos con exceso de grasa, azúcar y sal, nutrientes críticos para el aumento del sobrepeso, la obesidad y las enfermedades crónicas no transmisibles.
3- Permite modificar las decisiones de compra independientemente del nivel socioeconómico y nivel educativo. Además, este sistema reduce en mayor medida la intención de compra de productos con alto contenido de nutrientes críticos comparando con otros sistemas gráficos.
4- El etiquetado con octógonos negros con la leyenda “EXCESO DE” brinda información directa que permite que los consumidores identifiquen de forma rápida y fácil los productos que contienen cantidades en exceso de nutrientes críticos por lo cual es el que mejor cumple con el objetivo de salud pública.
5- Es el único que logra contrarrestar el efecto positivo que tienen los mensajes de nutrición (“0% grasas trans”, por ejemplo) en la intención de compra.
6- Necesita de un menor esfuerzo cognitivo y menos tiempo para tomar decisiones al momento de realizar la compra.
7- El sistema de perfil de nutrientes de la OPS ha sido elaborado por la máxima autoridad sanitaria de la región.
8- El sistema de perfil de nutrientes de la OPS está basado en las directrices de ingesta de nutrientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), desarrolladas a partir de una rigurosa revisión de la evidencia científica realizada por un panel de expertos.
9- El perfil está diseñado para identificar los productos que cuando son consumidos en cualquier cantidad y por cualquier individuo desequilibran la dieta.
10- El sistema de perfil de nutrientes de OPS es el que posee un mayor acuerdo con las Guías Alimentarias para la Población Argentina (GAPA).Entre los argumentos a favor del etiquetado, aseguran que es una herramienta útil para orientar a los consumidores y desmotivar el consumo de productos con exceso nutrientes críticos para el aumento del sobrepeso (Shutterstock)
La publicación también incluye diez mitos utilizados por la industria de alimentos y bebidas para oponerse al avance de esta política de salud, entre los que figuran que el sistema “estigmatiza o demoniza a los alimentos”, a lo que desde la Coalición respondieron con las recomendaciones internacionales en esta materia, basadas en la evidencia científica disponible así como también a la experiencia de países de la región que avanzaron con esta medida. “La implementación de un sistema de etiquetado frontal garantiza el derecho a la información de los consumidores informando acerca del contenido excesivo de nutrientes críticos. Informa, no demoniza”, sostienen.
Acerca de las críticas que aseguran que “existen trabas legales para avanzar con un sistema de etiquetado frontal de advertencia” y que “el país debe promover un sistema que se encuentre armonizado con Mercosur y Codex”, los especialistas responden que “por el contrario, los países son soberanos para poder avanzar en aquellas medidas que brinden protección a la salud de su población y que garanticen la seguridad alimentaria. Esto implica ir más allá de las disposiciones de Mercosur y Codex, especialmente en aquellos casos en los cuales las disposiciones no alcanzan el objetivo sanitario deseado”.
“Los argumentos utilizados por la industria de alimentos y actores afines carecen de fundamentos sólidos que los sustenten -reza el documento-. Desde la Coalición se enfatiza sobre la necesidad de que el Estado priorice la protección del derecho a la salud por sobre cualquier otro interés, basando la política de etiquetado frontal en los mejores estándares y en la evidencia científica libre de conflicto de interés, que da cuenta que esta medida debe consistir en el sistema de advertencias con octógonos negros y el perfil de nutrientes de la OPS”. Y concluyó: “Es urgente y necesario que el Estado avance en esta política para garantizar el derecho a la salud y el derecho a la información de los consumidores”.
Fuente: https://www.infobae.com/salud/2020/10/29/10-razones-por-las-que-argentina-debe-implementar-el-etiquetado-frontal-para-prevenir-la-obesidad-infantil/