La Casa de Auxilio de Ramos Mejía: un caso único en la gestión sanitaria

«Es más barato atenderse acá que ir a McDonald’s»

La institución es manejada ad honorem por los vecinos y brinda salud de calidad a bajo costo. La palabra de su presidente, Arturo Ter Akopian, candidato a concejal de La Matanza

La Casa de Auxilio de Ramos Mejía puede ser catalogada como una excepción a la regla dentro del ámbito sanitario. Creada hace más de cien años, funciona como una asociación civil sin fines de lucro, brinda servicios de salud a bajo costo, es gestionada de forma gratuita por los vecinos del barrio y no cuenta con aportes estatales. Arturo Ter Akopian, presidente de la institución y candidato a concejal de La Matanza por la lista que encabeza Patricia Cubría, en diálogo con Buenos Aires/12, asegura que «Gestionar bien la salud es gestionar los intereses de la comunidad».

«Es más barato atenderse acá que ir a McDonald’s. Nos sacamos de la cabeza que los bajos costos implican mal servicio, acá realmente se logran servicios de calidad. Todo esto se da porque hay dos valores centrales: transparencia y solidaridad. Buscamos humanizar tanto a los pacientes como a los médicos, a diferencia de la tendencia de las últimas décadas, donde pacientes y médicos se convirtieron en simples números en planillas. La institución busca valorizar el trato humano del médico hacia el paciente».

Arturo Ter Akopian lleva más de treinta años al frente de la Casa de Auxilio que está ubicada en Avenida de Mayo y Rivadavia, en pleno centro comercial de Ramos Mejía. La institución fue fundada en 1917y en ella conviven más de 60 especialidades médicas, tecnologías de primer nivel y planes de cobertura que empiezan desde los 1900 pesos por mes.

Explica Ter Akopian: “Somos privados de carácter público, una entidad privada de bien público. Creemos que la salud no es una mercancía y que debe ser accesible a todos. Al ser una asociación civil sin fines de lucro, que es lo que nos diferencia de las empresas, y tener una participación vecinal que garantice que los recursos no se malgasten, todo lo que ingresa se reinvierte para mejorar la salud de los vecinos y no para lograr más ganancia. Los servicios tienen un costo porque hay gente que vive de esto, por eso cobramos aunque a precios muy accesibles”.

Dado que no perciben aportes estatales, la Casa de Auxilio se mantiene con el ingreso que generan sus 4000 socios y las visitas de los pacientes. En la institución trabajan más de 120 personas entre médicos, enfermeras y empleados administrativos que, a diferencia de la comisión directiva, sí perciben un sueldo. Detalla el presidente: «Más allá de la cantidad de socios, muchos de los que se atienden no lo son. Por las puertas de la institución pasa un promedio de 500 personas por día y se hacen cerca de 180 mil prestaciones médicas al año. Además de todas las especialidades que hay, resaltamos que acá no hay que esperar meses para tener un turno y que el costo de una consulta médica promedio es realmente muy accesible», remarca el presidente.

La Casa de Auxilio cuenta con un centro de atención inmediata —guardia clínica con shock room—, servicios de diagnóstico por imágenes, análisis clínicos, vacunatorio, servicio de ambulancias, cobertura en todo el territorio nacional a través de Universal Assistance, la Dirección de Salud Mental y una serie de programas que apunta a fortalecer la atención al vecino: el MBA, MBA+ y el Chequeo Médico Preventivo.

El Programa de Medicina Básica Asistencial —MBA—, que lleva más de 20 años funcionando, brinda un servicio de ambulancia de primera línea de la Unidad Coronaria Morón, asistencia al viajero en todo el país y consultas con especialistas más baratas que para los no asociados. En el caso del MBA+, la institución sanitaria ofrece cobertura de salud que no es prepaga: «Lo que hicimos nosotros es firmar un convenio con Federación Patronal por el cual se paga 12.000 pesos por mes por persona y se le brinda todos los servicios de asistencia ambulatoria a través de la Casa de Auxilio por un lado, y si alguien tiene que internarse (la institución no cuenta con internación) por una operación o algún hecho de gravedad se indemniza y cada persona elige dónde atenderse», detalla Ter Akopian.

Sin embargo, aunque su principal actividad es la sanitaria, no se limitan exclusivamente ella sino que cuentan con 18 talleres que se desarrollan en el salón de la institución, entre ellas, teatro para niños y adultos, taller de la memoria para adultos mayores y Taekwon-Do. «Somos más que la salud. Nuestra esencia es la construcción comunitaria porque entendemos que si no construimos comunidad, no tenemos futuro. Somos un espacio de referencia social y política, siempre que hay alguna iniciativa vecinal el lugar de encuentro y reunión es acá. No sólo porque lo ofrecemos gratuitamente, sino también por nuestra esencia constructiva. Nos preocupa el bien común, entonces aportamos y trabajamos para el mismo», subraya el presidente.

Arturo Ter Akopian es un comerciante histórico del barrio de Ramos Mejía. «Inspirado por Hermes Binner», hace 10 años se afilió al Partido Socialista y desde entonces participó en las distintas elecciones. En 2019 fue candidato a intendente de La Matanza en la Lista Consenso Federal. En esta ocasión, Ter Akopian integra la lista Celeste y Blanca 4 como candidato a concejal de Patricia Cubría, que buscará ganarle en las PASO la interna de Unión por la Patria al histórico Fernando Espinoza. «Somos gente que hace por el prójimo. Patricia Cubría se acercó a nosotros valorando nuestra capacidad de gestión y transparencia, y nos invitó a formar parte de este Frente Vecinal que está compuesto por nosotros, por la Universidad de La Matanza, el Obispado y una Federación de más de 40 clubes de barrio, todas personas que venimos de la sociedad civil y que trabajamos al servicio de la gente».

Luego de señalar que ve «una muy mala gestión en el manejo de los recursos», ya que «la salud pública en el Municipio tiene mala atención, demoras en turnos, faltantes de médicos y de insumos», Ter Akopian destaca que cuenta «con la experiencia de gestionar en salud durante 30 años, con éxito y crecimiento ininterrumpido que lo avalan». 

“La Casa de Auxilio es el alto exponente de amor y solidaridad humana, amarla, defenderla y ampliarla depende de todos”, reza la placa inaugural del edificio. Ter Akopian cita esa frase y concluye: «Creemos que ese mensaje es muy fuerte y claro. La acción comunitaria que llevo adelante desde hace décadas en Casa de Auxilio me llevó a involucrarme en distintas problemáticas que afectan al lugar donde vivo, y cuando uno se involucra en asuntos del bien común, por el prójimo y el lugar en el que vive, la política se transforma en el lugar en el cual volcás ese interés».

Fuente: https://www.pagina12.com.ar/575602-es-mas-barato-atenderse-aca-que-ir-a-mcdonalds