Medicamento para dejar de fumar en 3 meses

Byteqi: cómo es el nuevo remedio, que ya está a la venta en farmacias, para dejar de fumar

El fármaco, financiado por el Sistema Nacional de Salud, se combina con una plataforma de apoyo psicológico para el paciente que quiera abandonar el tabaco. Los expertos recuerdan el grave pronóstico de esta enfermedad que es adictiva y crónica. 

Un hombre fuma
  1. Alicia Cruz Acal

Un apunte que hay que tener muy presente antes de continuar leyendo: el tabaquismo es una enfermedad. La parte negativa: que es adictiva, tiene pronóstico grave y presenta riesgo de sufrir recaídas. La positiva: que hay cura. Y para llegar a ella, una noticia positiva más: su nombre es Byteqi y es el nuevo fármaco oral financiado por el Sistema Nacional de Salud (SNS) para dejar de fumar

Se trata de un medicamento lanzado por el grupo farmacéutico europeo Neuraxpharm y a diferencia de Todacitan o Recigarum, tratamientos orales para el mismo propósito y también financiados por el SNS, el principio activo de Byteqi no es la citisiniclina, sino la vareniclina

Durante la presentación del nuevo medicamento, Carlos A. Jiménez-Ruiz, neumólogo y experto en tabaquismo, ha explicado el doble mecanismo de acción de este principio activo. ‘‘Es un fármaco que actúa selectivamente sobre los receptores nicotínicos específicos del Sistema Nervioso Central (SNC). Por una parte, estimula el receptor nicotínico y, al estimularlo, ayuda a controlar los síntomas del síndrome de abstinencia, como puede ser el nerviosismo, la ansiedad o la irritabilidad’’, ha destacado el experto. 

Jiménez-Ruiz ha agregado que, por otro lado, la vareniclina bloquea este receptor, lo que significa que el fumador no siente la recompensa ni el placer de fumar. ‘’La varenicilina se elimina en un 95% por la orina sin metabolizarse por el hígado. Por tanto, no tiene interacciones medicamentosas ni contraindicaciones, excepto en el caso de los pacientes con insuficiencias renales graves’’, ha matizado el especialista. 

El tratamiento estándar suele iniciarse entre una y dos semanas antes de la fecha prevista para dejar de fumar y dura 12 semanas. Acerca de su eficacia y seguridad, el neumólogo ha hecho referencia a diferentes estudios que apuntan en la misma dirección: es medicamento de primera opción para el tratamiento farmacológico del tabaquismo, tanto en fumadores sin patologías asociadas, como en fumadores con otras comorbilidades. Los efectos adversos leves que puede causar son náuseas y trastornos del sueño, pero son poco frecuentes y no obligan a retirar el tratamiento. 

‘‘Dos de cada cuatro fumadores van a morir como consecuencia del consumo de tabaco y, de estos dos, uno de forma prematura’’, ha lamentado José Luis Díaz-Maroto Muñoz, médico de atención primaria experto en tabaquismo. En este sentido, ha invitado a imaginar una silla con tres patas: la administración, los sanitarios y los pacientes: ‘‘Hay que insistir a todos en que estamos abordando una enfermedad crónica que necesita prevención, diagnóstico y tratamiento. Nada de cigarrillos electrónicos, esta enfermedad se trata con medicamentos y apoyo psicológico’’. 

Acerca de la situación actual del tabaquismo en España, Jiménez-Ruiz ha dado un dato revelador: a pesar de la progresiva reducción de consumo de cigarrillos convencionales en los jóvenes de entre 14 y 18 años, hay un aumento progresivo de cigarrillos electrónicos entre las personas de la misma franja de edad. El experto recuerda que hasta 56.000 personas al año mueren en España como consecuencia del consumo de cigarrillos.

una mano sostiene un cigarro

El apoyo psicológico, otro punto clave

Neuraxpharm ha presentado una solución integral para el abordaje del tabaquismo, que combina este fármaco con LybertaB, un programa digital de soporte psicológico al pacienteMaribel Cristóbal, psicóloga sanitaria en la Unidad Especializada en Tabaquismo del Hospital Clínico de Madrid, ha subrayado la necesidad de que los pacientes se sientan apoyados y acompañados durante el proceso de dejar de fumar: ‘‘La intervención psicológica ayuda no solo a mantener la abstinencia, sino también a gestionar las situaciones de riesgo y evitar recaídas’’.

‘’El tratamiento debe ser farmacológico y psicológico. Cuando hablamos de dependencia física, nos referimos a síntomas físicos que conforman el síndrome de abstinencia’’, ha detallado Cristóbal, quien ha detallado que en la dependencia psicológica entran en juego las emociones. ‘‘La tristeza es el más importante detonante para el consumo de tabaco desde el inicio’’, ha agregado.