¿Qué ocurre si eliminamos el gluten de la dieta sin ser celíaco?
Sin lactosa, sin azúcares añadidos o sin gluten. Estos son algunos ejemplos de frases informativas que aparecen en los envases de cada vez más productos que podemos encontrar en los supermercados. Frases necesarias para las personas que tienen una intolerancia o una alergia alimentaria, pero también reclamos que la población sana asocia a comida y alimentos más saludables.
Pero, ¿qué ocurre cuando una persona decide, sin la recomendación de un especialista, quitar el gluten de su dieta? ¿Está justificado si no es celiaco? El gluten es una proteína de origen vegetal que se encuentra en las harinas de cereales como el trigo, la cebada, el centeno o la avena, entre otros. Sin embargo, tiene una particularidad: una vez ingerido hay que digerirlo y metabolizarlo. Este proceso no pueden realizarlo los celiacos, por lo que tienen que eliminarlo de su dieta.
“Si has sido diagnosticado de enfermedad celiaca está absolutamente justificado su eliminación. Todo son ganancias y el bienestar del paciente se verá claramente mejorado”, en el caso de los pacientes diagnosticados de sensibilidad al gluten no celiaca (concepto en permanente revisión) también podría estarlo si ello les confiere mayor bienestar. “Aunque lo más correcto sea investigar qué es exactamente lo que les sienta mal, si una intolerancia a la fructosa, la presencia de sobrecrecimeinto bacteriano, una alteración del equilibrio de su flora bacteriana intestinal una intolerancia a la lactosa, o a los oligosacáridos disacáridos monosacáridos polioles fermetables (Fodmap)».
El gluten tiene un bajo valor nutricional y biológico, por lo que no es indispensable para el ser humano. Es decir, no pasará nada si se retira de la dieta, si bien no es indispensable para la salud, los alimentos que contienen gluten son ricos en otros nutrientes como fibra, vitaminas y minerales que sí son necesarios. “Además, si eliminamos el gluten de forma permanente nos podemos volver intolerantes a la proteína. Entonces empezarán los problemas con la dieta”.
Consecuencias colaterales
Algunos efectos derivados de eliminar el gluten sin un diagnóstico médico, para empezar, se produce el aumento del consumo de grasas y azúcares. El gluten aporta propiedades organolépticas que aportan a los productos elasticidad y una consistencia esponjosa muy agradable al gusto. Al eliminarlo hay que buscar otros sustitutos para intentar imitar esas propiedades.
Normalmente se opta por añadir grasas y azúcares. Además, el resultado suelen ser productos procesados, por lo que las personas sanas que eligen eliminarlo “siguiendo una moda o una tendencia que cree que todo lo sin es bueno para la salud se encuentran comiendo en sustitución otros productos que pueden ser nocivos”.
Esto además tira por tierra la creencia de que al quitar el gluten de la dieta hay una mayor pérdida de peso. Ambos expertos indican que no hay evidencias científicas que lo avalen. “La pérdida inicial que puede observar una persona se debe al cambio de dieta. Sin embargo, al eliminar el gluten aumenta el consumo de productos procesados, que tienen alto valor calórico y muy bajo valor nutritivo, por lo que a la larga puede tener el efecto contrario y favorecer el aumento de peso”, también afectará al bolsillo, ya que los productos sin gluten son más caros.
“Al celiaco, incluso a aquél que no ha desarrollado síntomas, que realice una dieta exenta de gluten. Por favor, no lo dude. Al intolerante al gluten, que investigue junto con su especialista en aparato digestivo o nutricionista, qué es exactamente lo que subyace. Al sano, que disfrute de los placeres de la vida, incluidos los culinarios, que son muchos, pero que no lo haga en exceso. Que realice deporte todos los días y que siga manteniendo un equilibrio físico y emocional como hasta ahora».
Fuente: https://cuidateplus.marca.com/alimentacion/nutricion/2017/08/26/-ocurre-eliminamos-gluten-dieta-celiaco-144189.html