Reasignación de género en menores
El Registro Civil porteño aprobó que los mayores de 16 años, sin necesitar el permiso de sus padres, pueden solicitar el cambio de nombre y sexo y así obtener un DNI que indique su elección. ¿Están en condiciones, aún en etapa de maduración, a decidir sin ser debidamente acompañados?
El Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas de la Ciudad de Buenos Aires informó, este lunes 8 de mayo, que los mayores de 16 años ya no necesitarán del permiso de sus padres para solicitar el cambio de nombre y “sexo” en el registro, y así obtener el DNI que indique el de su elección. “Donde hay una necesidad nace un derecho”, se repite sin cesar en la actualidad sin plantearse las consecuencias o costo de ello, en una sociedad adolescente que sigue sin acompañar y ayudar a los adolescentes, validando todo pedido, en realidad de adultos que proyectan en los menores, bajo la excusa de defender sus derechos.
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La noticia refiere lo siguiente: “En el marco de la Ley de Identidad de Género, el Registro del Estado Civil y Capacidad de las Personas de la Ciudad de Buenos Aires anunció este lunes que los adolescentes que tengan entre 16 y 18 años ya no necesitarán el permiso de sus padres para acceder al cambio del Documento Nacional de Identidad (DNI)”. La resolución se conoce tras el reclamo presentado en diciembre del año pasado por diversas organizaciones civiles de defensa de los derechos LGBT+.
El impulso, no la reflexión, de la sociedad actual es: “Lo quiero todo y lo quiero ahora”. Lo plantearía como estribillo una canción de Queen quienes militaban en otras épocas por diversos derechos (“I want it all and I want it now”).
Tiziana fue la primera niña trans de Salta en cambiar su identidad de género en el DNI (Foto: Diego Barbatto)
Cualquier idea que imposibilite la satisfacción del deseo, de la necesidad, implica una limitación a la libertad, no hay otra idea, otro valor a priorizar más que la libertad. Solo parece importar el planteo iconoclasta, ya que vivimos en una sociedad postmoderna y la deconstrucción es virtud.
Los antecedentes
Fieles a los postulados del Mayo Francés está: “Prohibido prohibir”. Desde ya, a quienes va dirigido pero posiblemente quienes lo gestan ignoran la vuelta, la reconsideración que tuvieron esos postulados por sus mismos protagonistas, como, por ejemplo, el famoso Dany el Rojo (Dany le rouge), quizás el personaje más emblemático del Mayo Francés. Pero hoy un hombre de la política alemana, usando su nombre civil Daniel Cohn-Bendit, cuestiona ese y otros postulados, desde otra perspectiva. “Sed realistas, exigid lo imposible”, o «Somos demasiado jóvenes para esperar” y tantos otros lemas, poblaron las paredes de París en esos momentos.
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Dany, Daniel Cohn-Bendit, no abandonará las posturas de la época, en particular una muy sonada en esos años como la de Foucault, Sartre, Derrida, y otros defendiendo la pedofilia, en razón de un caso resonante. El mismo publicará un libro autobiográfico traducido como “El gran Bazar” (olvidando que la palabra bazar se utiliza en francés coloquial para significar “caos/mezcla”), en la que defiende la pedofilia. Este libro, así como sus expresiones, motivaron que se intentara iniciar un proceso penal contra él que, sin embargo, nunca prosperó.
«¿Está en condiciones todo menor aún en una etapa de maduración, cuando sabemos que la adolescencia se prolonga en la actualidad, a decidir sin ser debidamente acompañado?», se preguntó De Rosa / (Getty)
Cambio de género y sexualización de la infancia
El proceso de sexualizar a la infancia y la adolescencia es una búsqueda de larga data, no de hace décadas, como esta manifestación de los intelectuales franceses en los años 70/80. En los últimos tiempos hemos visto cómo se ha instalado bajo forma de debate, en relación a los casos Corazza, Jay Mammon etc., algo que no sugiere debate y es la capacidad de consentimiento en los menores.
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En una nota reciente escribíamos que, sin duda y al mismo tiempo, el avance de las cirugías de reasignación de sexo actuaría sinérgicamente con esta tendencia. En realidad, avanzan de manera fuerte a tal punto que justamente el criterio en algunos países o regiones (Canadá, Minnesota, en EE.UU. etc.), se establece que son los menores hasta de 4 años quienes pueden decidir sobre su sexualidad. Al igual que el COVID estaba en China y no llegaría acá, hoy estamos comentando esta noticia.
Loiza Lamers es una modelo y empresaria holandesa, conocida por ser la ganadora de la octava temporada de Holland’s Next Top Model, y la primera mujer transgénero ganadora de la franquicia de televisión Top Model. Se sometió a la cirugía de cambio de sexo a los 18 años (Instagram)
El caso de Minnesota es especial ya que se ha implementado un dispositivo en el cual anuncian alto y claro que lo único que deben hacer los menores es conseguir llegar a las fronteras del estado y allí un aparato médico, social y jurídico los pondrá a resguardo de sus padres. Recientemente, vociferaba una de las propulsoras de esto, bajo la proclama de la libertad, que “los padres no tienen nada que ver en estas decisiones”, obviando una serie de temas de código civil, rol de los padres, etc. Porque no, entonces, esa sería la vía para hace desaparecer la figura de abuso, toda vez que se asuma esa barbarie y lo imposible de comprobar o no un consentimiento que, de todas maneras, el menor no está en condiciones de dar. Periodistas locales vienen diciendo y repitiendo que “si aceptó, no hay abuso”. No hay casualidades: los niños están en grave peligro.
La ventana de Overton
Este es un concepto de ciencia política, que Lehman y otros le dieronel nombre en honor post-mortem a Joseph Overton, miembro como ellos del Centro Mackinac de Política Pública, quien había delineado la idea que luego se formularía de manera concreta. Simplificando, el concepto se refiere a la adaptación del discurso político a una ventana, un rango conceptual, para que el mismo sea aceptado por el público en concordancia con sus ideas colectivas. Así se van variando los conceptos para hacerlos coincidir con la narrativa imperante en un determinado momento y lograr que sea aceptado. Sin embargo, años más tarde, un artículo de Evgueni Gorzhaltsán en RT (RussiaToday) lo modificaba respecto al concepto original, estableciendo que se trataba de una forma de instalar una narrativa de manera progresiva en la población y los pasos en los cuales se llevaba una idea inaceptable hasta hacerla popular e instalarla. Este concepto es el que se ha popularizado actualmente.
«El proceso de sexualizar a la infancia y la adolescencia es una búsqueda de larga data, no de hace décadas, como esta manifestación de los intelectuales franceses en los años 70/80», resalta De Rosa / (Getty)
La idea de ir haciendo aceptable lo inaceptable es una tarea constante pero vemos los frutos. Desde hace varios años padecemos una increíblemente intensa campaña mediático- política, en la cual se busca transformar a los menores de edad en objeto sexual válido.
En este caso que nos ocupa en principio se refieren al cambio de género en la documentación, quizás soslayando varios casos recientes como el de Johnatan Luna, el asesino de Micaela Ortega (Ley Micaela) ahora “Yoana”, o en cuanto reasignación de sexo, el de Abigail, la pareja de Espósito Valente, quienes asesinaron a Lucio Dupuy.
Extrañamente, sin embargo, al mencionar el cambio de documentación se habla de “cambio de sexo”, con lo cual parece ser aceptada que la construcción social (género) no puede superar a la realidad biológica. Pero, principalmente, se olvida el factor edad y maduración psicosexual, ya que establecen una necesidad que dicen es existente, pero en realidad imponen, no otorgan un derecho. Se olvida que la reasignación de sexo es algo mucho más complejo que incluye tratamientos médicos, la cirugía de reasignación y la terapia hormonal. En menores de edad este es un tema complejo y controversial que ha sido objeto de intensos debates en la sociedad y de estudios médicos y jurídicos.
La cirugía de reasignación es un procedimiento que implica la eliminación de los órganos sexuales existentes y la creación de nuevos órganos sexuales / (Foto: Twitter/RedDiversidad)
¿Está en condiciones todo menor aún en una etapa de maduración, cuando sabemos que la adolescencia se prolonga en la actualidad, a decidir sin ser debidamente acompañado?
Todo lo que significa
La cirugía de reasignación es un procedimiento que implica la eliminación de los órganos sexuales existentes y la creación de nuevos órganos sexuales. También puede involucrar la terapia hormonal, que ayuda a cambiar las características sexuales secundarias de una persona, como la voz, la distribución del cabello, la masa muscular y la distribución de grasa.
Hay varios casos en los países que están más “adelantados” a nosotros, que muestran el calvario de quienes mutilados y ya habiendo madurado, se quejan amargamente de no haber sido ayudados a superar lo que en algunos casos se conoce como disforia de género en la psiquiatría, entidad que hoy parece olvidada, ya que esta “prohibido prohibir” y todo enunciado de una necesidad “es un derecho”.
Para De Rosa, «en general, la decisión de buscar la reasignación de género debe ser tomada por el menor de edad en conjunto con sus padres, familiares y médicos» / Archivo
En todos los casos los adultos que impulsan esto, y nos preguntamos con qué fines reales, buscan que sea claro que los adultos, simplemente hasta el día anterior a la decisión, sus padres, pierdan el derecho a velar por sus hijos. Este caso, muy claro en Canadá o Minnesota como mencionaba, se traslada bajo forma de tragedia en muchas familias.
Una aclaración debe ser hecha: si bien en principio estamos hablado de “solo” el cambio de género en la documentación, los estudios internacionales señalan la fuerte presión para solicitar en caso de serles otorgado los medios a la reasignación, así como el paso siguiente en el activismo de esta tendencia.
En general, la decisión de buscar la reasignación de género debe ser tomada por el menor de edad en conjunto con sus padres, familiares y médicos. Los pacientes menores de edad deben recibir una evaluación exhaustiva antes de cualquier tratamiento médico, incluida la terapia hormonal o la cirugía. Se debe evaluar la salud mental del paciente, la capacidad de tomar decisiones informadas y el grado en que comprende los posibles riesgos y beneficios de la reasignación de género.
Uno de los mayores riesgos de la reasignación en menores de edad es que el o la joven pueda arrepentirse de su decisión. Esto puede afectar su salud mental manera crónica.
Uno de los mayores riesgos de la reasignación en menores de edad es la posibilidad de arrepentirse de la decisión más tarde en la vida. Además, el proceso puede ser largo y doloroso, lo que puede afectar la salud mental del paciente de manera crónica.
Es mucho lo que se puede plantear al respecto y esto sea solo un diletantismo alrededor de un tema que conmociona, en particular a quienes creemos que los menores deben ser protegidos y, a veces, de sí mismos, de sus impulsos autolesivos y hasta autodestructivos.
Quizás, para cerrar, viene a consideración el aspecto epimeteico de nuestras sociedades en relación a los dos hermanos: Prometeo quien anticipaba el futuro y reflexionaba previo a los actos y, a la inversa, Epimeteo quien reflexionaba, en caso de hacerlo, pero a posteriori, de hecho él le lleva a su mujer, Pandora, la famosa ánfora (se la llamó luego caja).
A pesar de las advertencias de su hermano que ese regalo era una trampa de Zeus, Pandora, como los adolescentes y como indica su nombre, poseía todos (pan) los dones (dora), y diríamos que todas las posibilidades, sin embargo, la curiosidad la hace abrir la caja y deja librada a la humanidad a todos los males, aunque, sin embargo, alcanza a cerrarla y queda dentro solo uno, el último, la esperanza. Es de notar que para los griegos la esperanza era, según algunos autores, algo con connotación negativa y no como la actual o de uso frecuente, positiva.
Estamos a las puertas de algunos temas en la actualidad que quizás debamos ser extremadamente precavidos ya que hay cajas que se abren pero luego no se pueden cerrar y lo que es un obsequio puede terminar en algo de lo cual no conozcamos o podamos abordar sus consecuencias.
Abrir, pedir es simple, pero ¿sabemos que abrimos?
Fuente: https://www.infobae.com/salud/2023/05/11/reasignacion-de-genero-en-menores-cual-es-el-impacto-psicologico-y-social-de-esta-modificacion/